¿Abaratar el empleo juvenil o dinamitar el pacto social?

El nuevo contrato juvenil, puesto encima de la mesa de negociación de la reforma laboral por la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), y por su responsable de Relaciones Laborales, José de la Cavadalos es una de las nuevas ocurrencias que no ideas de la organización patronal. Hasta los treinta años de edad, sin derecho a indemnización por despido, menores cuotas sociales, baja retribución, inferior al salario mínimo interprofesional y por un periodo máximo de un año, es cuando menos una burla a la sociedad, un intento de mantener una situación de explotación de los jóvenes que desean acudir al mercado de trabajo y un planteamiento demagógico que esconde intereses ocultos.
La propuesta se basa en una serie de argumentos que los "think tank" de la derecha neoconservadora intentan convertir en dogmas de fe.
* Considerar que un reducción de los costes de despido aumenta la creación de empleo. El poder despedir más barato nunca ha sido y así lo demuestran las encuestas un argumento empresarial para contratar. El contrato se efectúa cuando existe una adaptación del trabajador al puesto de trabajo demandado. ¿Y aunque el dogma fuera cierto para que abaratar el despido con nuevas modalidades de contrato cuando existen los contratos temporales?. El 90% de los nuevos contratos realizados en el año 2010 son temporales y sin coste de despido cuando el contrato finaliza.
* Suponer que la reducción de las cuotas a la Seguridad Social son un instrumento eficaz de creación de empleo. La reducción de la cuota de la Seguridad Social en uno, dos o incluso tres puntos por su leve repercusión sobre los costes laborales por trabajador contratado no va a producir un incremento de las contrataciones. Es llevar el marginalismo a sus grados extremos, pensando ¿ilusamente? que una mínima reducción del coste salarial va a producir efectos positivos en el empleo además de aumentar el excedente empresarial o poner en peligro el equilibrio presupuestario de la Seguridad Social.
* Disminuir el salario por debajo del salario mínimo. Esta medida además de reducir la renta y el nivel de vida de los damnificados, los jóvenes en paro, beneficia sobre todo a los contratadores. Permite pagar salarios inferiores a los mínimos legales, aumentan también el excedente empresarial, y precarizan el trabajo, estableciendo una modalidad más precaria todavía que los contratos temporales.
* Aumentar la edad de aplicación de los contratos juveniles hasta los treinta años. Supone, prolongar la precariedad para la parte contratada y conseguir trabajadores, jóvenes, formados, treinta ños, y con mayor preparación que la media para la "marxiana" parte contratante.
Es absurdo pensar que el contricante, que no contrario, es tonto. Cuando palntea propuestas inaceptables por la otra parte solo esta buscando, eso, que la otra parte no las acepte y que se "dinamite" la posiblidad de dialogo, en este caso el dialogo social.
José María Iváñez
Secretario de Empleo y Emprendedores PSM - PSOE
Palabras clave: Empleo